El Renacimiento del Sector de la Construcción: Clave para la Reactivación Económica en Paraguay
La importación de maquinarias para la construcción creció un 22%, impulsando el sector y creando un efecto dominó que fortalece la economía paraguaya. La confianza regresa tras años de crisis.
El Renacimiento del Sector de la Construcción: Clave para la Reactivación Económica en Paraguay
El último informe de la Cámara de Distribuidores de Automotores y Maquinarias (Cadam) revela un dato alentador: la importación de maquinarias para la construcción creció un notable 22% en lo que va del año. Este aumento no solo marca una tendencia positiva, sino que también refleja la confianza de los inversores y empresarios en la recuperación sostenida de un sector que había estado sumido en la incertidumbre durante los últimos dos años.
La construcción en Paraguay cerró el mes de julio con señales indiscutibles de mejoría. Según datos oficiales, las ventas de materiales de construcción aumentaron un 1,7%, mientras que las comercializaciones vinculadas a obras públicas y privadas registraron un incremento del 4,9% en comparación con el mismo período del año anterior. Si bien estos porcentajes pueden parecer modestos a primera vista, toman mayor relevancia al considerar el contexto de crisis que enfrentó el sector, con una disminución sostenida en la actividad y más de 80.000 trabajadores afectados por la paralización de obras.
El impacto positivo de la reactivación del sector de la construcción va más allá de los números. Esta industria es un motor económico con un efecto multiplicador que toca prácticamente todos los sectores de la sociedad. Desde ingenieros, arquitectos y albañiles, hasta empresas de transporte y proveedores de materiales, miles de empleos dependen de la vitalidad de este rubro. Además, la reactivación de obras impulsa actividades económicas complementarias como el comercio, los servicios y la logística, beneficiando a lo largo de toda la cadena productiva.
Un aspecto crucial es que la inversión en maquinaria nueva no solo mejora la capacidad de producción, sino que también incrementa la eficiencia y la calidad de las obras. Este ciclo positivo fortalece el crecimiento económico en general, dando lugar a una economía más dinámica y estable.
Para que este impulso se mantenga a largo plazo, es esencial crear y mantener condiciones favorables para el desarrollo del sector. En el ámbito privado, la seguridad jurídica es clave, ya que brinda confianza a los inversores y asegura la protección de los derechos tanto de empresarios como de trabajadores. Por otro lado, en el sector público, el cumplimiento riguroso de los plazos de pago y la planificación adecuada de las inversiones en infraestructura son indispensables para evitar los atrasos que históricamente han ralentizado el progreso.
El déficit de infraestructura en Paraguay representa más del 50% del Producto Interno Bruto (PIB), lo que subraya la necesidad urgente de seguir impulsando la construcción. Las oportunidades de desarrollo no solo generarán empleo y dinamismo económico, sino que también contribuirán a crear una economía más inclusiva y sostenible a largo plazo.
En conclusión, la recuperación del sector de la construcción es una excelente noticia para Paraguay. A medida que este motor económico clave vuelva a moverse, es vital asegurar que el impulso se mantenga a través de políticas coherentes y un entorno estable. Solo así se podrá maximizar el impacto positivo de esta reactivación, beneficiando a más sectores y garantizando un crecimiento sostenido en el tiempo.